21 de noviembre, Día Mundial contra el Cáncer de Páncreas Se requiere una acción conjunta de todos los especialistas sanitarios para mejorar el diagnóstico precoz del cáncer de páncreas El cáncer de páncreas es uno de los pocos tumores que mantiene sus elevadas cifras de mortalidad con el tiempo El alcohol o el tabaco son factores relacionados con el cáncer de páncreas, aunque la mayoría de los casos son esporádicos El tratamiento para el cáncer de páncreas es multifactorial y siempre debe basarse en una terapia individualizada La FEAD se une al Día Mundial contra el Cáncer de Páncreas, celebrado el 21 de noviembre y busca concienciar sobre la importancia del diagnóstico precoz para disminuir la mortalidad de este tumor 20 de noviembre de 2024. El diagnóstico precoz del cáncer de páncreas requiere una acción conjunta y coordinada de todos los especialistas sanitarios, comenzando por atención primaria, para detectar aquellos casos en los que existan signos de alarma de padecer este tumor y conseguir así disminuir su elevada mortalidad. En este sentido, la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), se suma a la celebración del Día Mundial contra el cáncer de páncreas, celebrado el 21 de noviembre, para incidir en su relevancia, mortalidad y en la importancia de mejorar su diagnóstico temprano. El cáncer de páncreas es uno de los pocos tumores que sigue manteniendo sus elevadas cifras de mortalidad con el paso del tiempo porque, entre otros factores, “no se ha conseguido avanzar en el diagnóstico precoz”, indica el Dr. Julio Iglesias-García, tesorero de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) y jefe de Sección del Área de Endoscopias Digestivas del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela. A pesar de los avances en las técnicas de imagen, “sigue habiendo un problema con la sospecha diagnóstica”. Por ello, “tenemos que trabajar en educarnos todos empezando por la atención primaria, que es el primer contacto con los pacientes” y de ahí, “tanto radiólogos, gastroenterólogos … podremos intentar detectar estos tumores lo antes posible”. Síntomas y causas Entre los síntomas principales se encuentran el dolor epigástrico (en la boca del estómago), pérdida de peso, náuseas y/o vómitos, o la presencia de ictericia, entre otros. Para mejorar el diagnóstico precoz, “uno de los síntomas que nos tiene que alertar son las personas con diabetes diagnosticadas recientemente que no son el típico perfil de diabetes tipo 2 con obesidad o sobrepeso”, si no aquellos “recientemente diagnosticados, pero más bien delgados”. Además, aquí también se incluyen los pacientes que comienzan de repente con un mal control de la diabetes y con una pérdida de peso excesiva. “Ambas situaciones nos pueden indicar que hay un problema en el páncreas más grave detrás”, explica el Dr. Iglesias-García. Los antecedentes familiares y las mutaciones genéticas también son factores de riesgo importantes que deben ser tenidos en cuenta y requieren seguimiento porque tienen más probabilidades de desarrollar este tumor. “Realizar un buen historial clínico que incluya la anamnesis de antecedentes familiares puede llevarnos al diagnóstico antes de que aparezcan los síntomas”, añade. Entre las distintas causas que pueden influir en la aparición de este tumor se encuentran el consumo de alcohol y el tabaquismo, de hecho, “los pacientes fumadores tienen mayor riesgo de padecer cáncer de páncreas”. Aunque, “la realidad es que la mayoría de los pacientes son esporádicos”, apunta el experto. Por todas estas razones, se recomienda adoptar hábitos de vida saludables, como no fumar, limitar el consumo de alcohol, hacer ejercicio y mantener una dieta equilibrada porque “fomentar un estilo de vida saludable no solo beneficia al páncreas, sino también a la salud en general”, enfatiza. Diagnóstico Una vez que ya existe la sospecha de la presencia de cáncer de páncreas, la ecoendoscopia es la herramienta más útil para su detección. “Desarrollar unidades de ecoendoscopia con acceso fácil y rápido para los pacientes es crucial para identificar estos tumores, especialmente los más pequeños”, además, “esta técnica también permite caracterizar estas lesiones y biopsiarlas si es necesario”, explica el Dr. Iglesias-García. Posteriormente, se realizan pruebas complementarias como el TAC, resonancia…, pero “tenemos que ser conscientes de que para el diagnóstico en fases iniciales la prueba por excelencia es la ecoendoscopia y nos permitirá confirmar la sospecha diagnóstica de este tumor”. Por lo que el diagnóstico se debe basar en una estrategia centrada en, por un lado, la sospecha y por otro, la confirmación mediante la realización de pruebas según los protocolos pancreáticos específicos. Tratamiento El tratamiento del cáncer de páncreas es multifactorial y se debe tratar de una manera individualizada por paciente. En este sentido, no solo necesita un enfoque oncológico centrado en quimioterapia, si no, además, “se necesita un tratamiento de soporte”, apunta el experto. Esto incluye un tratamiento enzimático sustitutivo, ya que muchos pacientes padecen insuficiencia pancreática. Además, “optimizar el tratamiento del dolor, abordar la malnutrición y un tratamiento local de los nervios que dirigen el dolor pancreático son esenciales para mejorar la calidad de vida del paciente”. Por otro lado, se están explorando nuevas estrategias de tratamiento local guiado por ecoendoscopia como, por ejemplo, el uso del fósforo-32 y, aparte, la radiofrecuencia. “Todo esto suponen nuevas ventanas de oportunidad para el tratamiento y las opciones que podemos ofrecer a los pacientes”, concluye el Dr. Julio Iglesias-García. FEAD La Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) es una institución privada sin ánimo de lucro, creada y promovida por la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) y sometida al protectorado del Ministerio de Educación y Ciencia. Entre sus objetivos principales destacan promocionar la salud digestiva de la población española, realizar campañas de prevención de las enfermedades digestivas mediante la educación sanitaria de la población, apoyar la investigación en gastroenterología y promover la formación de calidad de los profesionales sanitarios en esta especialidad. Cuenta con el apoyo y colaboración de los más de 3.340 especialistas socios de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD). Más información www.saludigestivo.es PARA MÁS INFORMACIÓN Y GESTIÓN DE ENTREVISTAS: Montse Llamas (636 820 201) mllamas@alaoeste.com Sonia Joaniquet (663 848
El Síndrome del Intestino Irritable (SII) es una de las patologías digestivas más frecuentes y con mayor afectación de la calidad de vida
21 de octubre, Día Nacional del Síndrome del Intestino Irritable (SII) El Síndrome del Intestino Irritable (SII) es una de las patologías digestivas más frecuentes y con mayor afectación de la calidad de vida Un 15% de la población mundial, es decir, entre 1 y 2 personas de cada 10 pueden tener síntomas compatibles con el Síndrome del Intestino Irritable (SII) Los pacientes con SII tienen síntomas digestivos crónicos que tienen un efecto notable sobre su calidad de vida El tratamiento es complejo y personalizado, no sirve el mismo para todos los pacientes La FEAD se suma al Día Nacional del Síndrome del Intestino Irritable (SII), celebrado el 21 de octubre, y busca concienciar sobre esta patología 17 de octubre de 2024. Con motivo del Día Nacional del Síndrome del Intestino Irritable (SII), celebrado el 21 de octubre, la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) busca concienciar sobre esta patología incidiendo en la importancia del diagnóstico basado en criterios de síntomas. El Síndrome del Intestino Irritable (SII) es un trastorno funcional digestivo, caracterizado por una disfunción del eje intestino-cerebro y cuyos síntomas provienen del intestino delgado y del colon. “Es importante destacar que hasta un 40% de la población mundial presenta síntomas digestivos de tipo funcional y un 10-15%, es decir, entre 1 y 2 personas de cada 10 pueden tener síntomas compatibles con el SII”, apunta la Dra. Carolina Malagelada, experta y secretaria de la FEAD y médico adjunto del Servicio de Aparato Digestivo del Hospital Vall d’Hebron (Barcelona). Con todo esto, el SII es muy fácilmente confundible con otras patologías con las que comparte síntomas, de aquí la importancia de excluir otras enfermedades antes de dar una valoración final en positivo. Síntomas y tipología Los síntomas de este trastorno se centran en dolor o molestia abdominal asociada con cambios en el hábito defecatorio. Dentro de esto, hay varios subtipos entre los que se encuentran el subtipo diarrea, el subtipo estreñimiento y un grupo denominado el subtipo mixto. “Lo importante es que haya una molestia o dolor abdominal de más de 6 meses de evolución acompañado de un cambio en la frecuencia o consistencia de las deposiciones”, apunta la Dra. Malagelada, razones por las que es una de las enfermedades que más afecta la calidad de vida de los pacientes. Además, puede haber otros síntomas que lo acompañan como la distensión abdominal o sensación de hinchazón o flatulencia, entre otros. Por otro lado, “los pacientes suelen referir que factores relacionados con el estilo de vida, como la alimentación y el estrés influyen negativamente en los síntomas”, concluye la doctora. Igualmente, la sobreinformación en internet y el aumento de consultas por trastornos funcionales reflejan una mayor conciencia de la población sobre la salud digestiva. Diagnóstico El diagnóstico está basado en los criterios de Roma, basados en la frecuencia y duración de los síntomas. En este sentido, “es importante señalar que no existe una prueba diagnóstica para identificar el SII”, por eso, “realizamos un diagnóstico tras excluir otras enfermedades digestivas mediante las pruebas que consideremos necesarias”, señala la doctora. Una vez se ha alcanzado el diagnóstico de intestino irritable, “debemos comunicarle al paciente nuestra sospecha diagnostica de que se trata de un Síndrome del Intestino Irritable, en lugar de repetir múltiples pruebas cuyos resultados dan valores normales”. Para esto “la habilidad, experiencia y conocimiento del médico también son claves”. Por otro lado, “es igual de importante que, aunque las pruebas reflejen valores normales el paciente confíe en la valoración del médico y su diagnóstico” porque, a veces, “el no tener esa prueba diagnóstica dificulta la credibilidad de esta valoración en positivo” por lo que, “una relación de confianza y empatía médico-paciente es fundamental para el posterior tratamiento de este trastorno”. Tratamiento La gran mayoría de pacientes con SII presentan síntomas relativamente leves “por lo que se pueden tratar con lo que llamamos medidas conservadoras”, añade la doctora. No obstante, un primer paso importante en todos los casos es comunicar al paciente el diagnóstico y explicarle bien lo que significa, posteriormente, “hay disponibles múltiples opciones terapéuticas que incluyen medidas dietéticas, mejorar el descanso y reducir el estrés y, por supuesto, tratamientos farmacológicos”. Sin embargo, “el tratamiento siempre dependerá de los síntomas que presente el paciente y la gravedad de estos, por lo que, se requiere un manejo personalizado e individualizado por paciente ya que no sirve el mismo para todos”, confirma. FEAD La Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) es una institución privada sin ánimo de lucro, creada y promovida por la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) y sometida al protectorado del Ministerio de Educación y Ciencia. Entre sus objetivos principales destacan promocionar la salud digestiva de la población española, realizar campañas de prevención de las enfermedades digestivas mediante la educación sanitaria de la población, apoyar la investigación en gastroenterología y promover la formación de calidad de los profesionales sanitarios en esta especialidad. Cuenta con el apoyo y colaboración de los más de 3.340 especialistas socios de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD). Más información www.saludigestivo.es PARA MÁS INFORMACIÓN Y GESTIÓN DE ENTREVISTAS: Montse Llamas (636 820 201) mllamas@alaoeste.com Sonia Joaniquet (663 848 916) sjoaniquet@alaoeste.com
Una de cada tres Infecciones por Hepatitis C (VHC) se sigue diagnosticando tarde, cuando el daño en el hígado es irreversible
1 de octubre, Día Internacional de la Hepatitis C Una de cada tres Infecciones por Hepatitis C (VHC) se sigue diagnosticando tarde, cuando el daño en el hígado es irreversible Pese a tener desde hace una década un tratamiento que la cura, la infección por el VHC todavía se cobra cuatro muertes a la semana en nuestro país Se estima que en España quedan aún 20.000 personas con Hepatitis C que desconocen que tienen la infección La utilización de la IA y las nuevas herramientas diagnósticas ensayadas en la COVID (pooling de muestras) permiten un abaratamiento del diagnóstico, lo que lleva a los profesionales a mantener que la realización de la prueba tiene un coste efectivo La propia OMS recomienda que se ofrezca a todos los adultos, sin un test previo, como estrategia para alcanzar los objetivos de eliminación en 2030 30 de septiembre de 2024. Con cerca de 170.000 pacientes tratados y curados desde 2015, España lidera a nivel mundial la lucha contra la hepatitis C, aun así, es necesario seguir avanzando en la eliminación de esta infección viral crónica para la que no existe vacuna, pero sí un tratamiento que la cura. “Una década después de la llegada de los antivirales (ADD) que curan la enfermedad, se producen semanalmente en nuestro país cuatro muertes imputables a causas relacionadas con la hepatitis C que son evitables, puesto que hay un tratamiento que la cura prácticamente en el 100% de los casos y que, si se administra de forma precoz, puede evitar el daño que esta causa en el hígado a lo largo de los años”, explica el Dr. Javier García-Samaniego, coordinador de la Alianza para la Eliminación de las Hepatitis Víricas en España (AEHVE) y Jefe de la Sección de Hepatología del Hospital Universitario La Paz (HULP) de Madrid. La clave de estos datos reside en el diagnóstico tardío, que se produce en un tercio de los casos y que es el que hace que el daño que ya existe en el hígado no sea, en muchos casos, reversible, a pesar de la curación de la infección. Con una prevalencia de infección activa en la población general que el Ministerio de Sanidad situaba en el 0,22% en el año 2018, y que la AEHVE estima que estará hoy en torno al 0,1%, los casos que quedan por diagnosticar, tratar y curar son, en población general, los de personas que contrajeron la infección hace dos décadas y no saben que la tienen o no fueron tratadas en su momento. Para alcanzar la curación de la infección en estos pacientes es necesario un último esfuerzo de información y sensibilización en torno a la hepatitis C y de detección de la infección no diagnosticada, ofreciendo y realizando la prueba de diagnóstico (un sencillo test de sangre) a toda la población, sin un test previo de anticuerpos frente al VHC, nacida entre 1945 y 1975. La propia OMS va más allá en su última actualización de las estrategias globales necesarias para acelerar la eliminación de la hepatitis C en el mundo, recomendando el cribado para la población general en esas edades. ”Cada persona con un diagnóstico tardío (los síntomas de la hepatitis C son inespecíficos y la enfermedad puede tardar hasta 20 años en manifestarse) generará una gran carga de enfermedad -cirrosis y cáncer de hígado, entre otros- para el sistema sanitario”, explica la Dra. Marta Casado, presidenta de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), para quien “la incorporación de la IA y de estrategias diagnósticas como la agrupación de muestras o pooling, como está haciendo Galicia con excelentes resultados, permitiría hacer un cribado por edad en la población general completamente asumible”. Se estima que en nuestro país quedan aún 20.000 personas con hepatitis C que desconocen que tienen la infección. Pero la localización de los casos no diagnosticados o perdidos en la población general no es el único reto. El otro gran reto, “quizás el desafío más difícil”, según la Dra. Casado, es realizar una búsqueda activa de casos entre los colectivos más vulnerables, personas alejadas de los circuitos asistenciales habituales y a las que solo es posible llegar con recursos descentralizados y estrategias alternativas. “En ese camino estamos los especialistas desde una década, con el apoyo de las ONG y de las entidades locales, más cercanas a estas poblaciones”, con estrategias de microeliminación que acercan el diagnóstico y el tratamiento a estas personas. Sobre la hepatitis C La hepatitis C es un importante problema de salud pública por su incidencia, morbimortalidad y costes sanitarios. Hasta la aparición de los tratamientos antivirales de acción directa, era la primera causa enfermedad hepática terminal y cáncer de hígado en los países occidentales, así como la primera indicación de trasplante hepático. Las causas de infección más comunes son las prácticas de inyección poco seguras, la esterilización inapropiada del equipo médico y la transfusión de sangre y hemoderivados antes de 1990. Aunque es menos frecuente, el virus de la hepatitis C se puede transmitir por vía sexual- se vincula a prácticas como el chemsex– y pasar de la madre infectada al hijo. La hepatitis C es una enfermedad silente, que no da síntomas. No existe ninguna vacuna frente a la hepatitis C, pero se cuenta con un tratamiento que cura la enfermedad en casi el 100% de los casos. FEAD La Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) es una institución privada sin ánimo de lucro, creada y promovida por la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) y sometida al protectorado del Ministerio de Educación y Ciencia. Entre sus objetivos principales destacan promocionar la salud digestiva de la población española, realizar campañas de prevención de las enfermedades digestivas mediante la educación sanitaria de la población, apoyar la investigación en gastroenterología y promover la formación de calidad de los profesionales sanitarios en esta especialidad. Cuenta con el apoyo y colaboración de los más de 3.340 especialistas socios de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD). Más información www.saludigestivo.es PARA MÁS INFORMACIÓN Y GESTIÓN DE ENTREVISTAS:
La enfermedad celíaca puede ser asintomática o no, además, sus síntomas con fácilmente confundibles con otras patologías
5 de mayo, Día Internacional del Celíaco La enfermedad celíaca puede ser asintomática o no, además, sus síntomas con fácilmente confundibles con otras patologías La enfermedad celíaca afecta a individuos predispuestos genéticamente, en los que el gluten presente en ciertas harinas desencadena una reacción inmunológica alterada que daña la mucosa del intestino delgado Los síntomas más comunes, en caso de presentarlos, son diarrea crónica, que puede cursar con déficits nutricionales, distensión y dolor abdominal El único tratamiento para la enfermedad celíaca consiste en llevar una dieta exenta de gluten La FEAD se suma, un año más, a la celebración de este día internacional, para concienciar sobre esta enfermedad e incidir en su sintomatología, no siempre presente, así como en su tratamiento 2 de mayo de 2024. Con motivo del Día Internacional del Celíaco, celebrado el 5 de mayo, la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) busca concienciar sobre esta enfermedad incidiendo en identificar sus síntomas, no siempre presentes, así como su diagnóstico y tratamiento. En este sentido, la enfermedad celíaca es una patología que afecta a los individuos predispuestos genéticamente. En ellos, el gluten presente en ciertas harinas desencadena una reacción inmunológica alterada que daña la mucosa del intestino delgado, causando la malabsorción de nutrientes. “Cabe destacar que la enfermedad celíaca afecta a 1 de 100 personas en nuestro país y, aparte de que puede aparecer en cualquier momento de la vida, es crónica”, indica la Dra. Marta Tejedor, responsable del Comité de Redes Sociales de la FEAD y jefa del Servicio de aparato digestivo del Hospital Universitario Infanta Elena (Madrid). Por todo esto, “podemos decir que no es muy frecuente siempre que hablemos de los casos diagnosticados, razón por la que se la conoce como la enfermedad del iceberg”. Síntomas Los síntomas de esta enfermedad son inespecíficos, siendo variables e, incluso, a veces inexistentes. Los síntomas más comunes son distensión abdominal, dolor abdominal, retraso del crecimiento en el caso de los niños y, el más común, diarrea crónica. En el caso de que el daño a la mucosa intestinal sea significativo, la enfermedad cursará con déficits nutricionales. También “puede haber síntomas atípicos, como una depresión o irritabilidad y cambios en el comportamiento”, apunta la doctora. En otros casos, en las personas que no presentan síntomas claros y evidentes sí pueden presentar un déficit de vitaminas y minerales, “entre los que la anemia ferropénica es el más común” junto con “problemas relacionados con la absorción de calcio” y, en los casos más graves, “puede haber una alteración del perfil hepático, incluso”, concluye la Dra. Tejedor. Todo esto hace que sus síntomas sean fácilmente confundibles y puedan solaparse con otras patologías entre las que se encuentran, por ejemplo, el Síndrome del Intestino Irritable (SII) o la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII). Diagnóstico El diagnóstico de la enfermedad celíaca es “relativamente sencillo” ya que, en un primer momento, se basa en la realización de una prueba serológica de anticuerpos anti-transglutaminasa. Además, cabe resaltar que “estas pruebas presentan una tasa de sensibilidad y especificidad del 98%”, afirma la doctora. Por lo que, en caso de resultar negativa “podemos descartar razonablemente padecer la enfermedad” y no se suelen realizar más pruebas ya que “no es lo habitual dar negativo en el test serológico y positivo en enfermedad celíaca en otras pruebas”, no obstante, “siempre dependerá de las consideraciones del médico”. Por el contrario, si la prueba serológica es positiva se realizan más pruebas para su confirmación, “como es el caso de la biopsia intestinal”, aunque “con la prueba serológica ya obtenemos una primera información muy fiable”, además, “las ventajas que presenta es que es simple, sencilla de practicar y se puede realizar independientemente de la edad del paciente” indica. Tratamiento ”El único tratamiento definitivo para la enfermedad celíaca es la dieta estricta exenta de gluten de por vida”, apunta la Dra. Marta Tejedor. Además, aparte de esto, “es importante equilibrar la dieta con todos esos alimentos de por sí exentos de gluten como la verdura, frutas, carnes, etc.” y, “en el caso de alimentos procesados debemos fijarnos siempre en que el envoltorio lleve el símbolo de la espiga barrada” ya que son los alimentos sin gluten certificados por la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE). En este sentido, “debemos tener cuidado con la contaminación cruzada” y no compartir utensilios como la tostadora o las sartenes que se hayan utilizado para cocinar productos con gluten, siempre lavar los utensilios de cocina y almacenar los productos libres de gluten separados del resto. Tanto la adherencia a la dieta como el cuidado con la contaminación cruzada “son muy importantes porque no hacer esto bien a largo plazo puede llevar a inflamaciones mantenidas del intestino y provocar consecuencias muy negativas”. FEAD La Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) es una institución privada sin ánimo de lucro, creada y promovida por la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) y sometida al protectorado del Ministerio de Educación y Ciencia. Entre sus objetivos principales destacan promocionar la salud digestiva de la población española, realizar campañas de prevención de las enfermedades digestivas mediante la educación sanitaria de la población, apoyar la investigación en gastroenterología y promover la formación de calidad de los profesionales sanitarios en esta especialidad. Cuenta con el apoyo y colaboración de los más de 3.250 especialistas socios de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD). Más información www.saludigestivo.es PARA MÁS INFORMACIÓN Y GESTIÓN DE ENTREVISTAS: Montse Llamas (636 820 201) mllamas@alaoeste.com Sonia Joaniquet (663 848 916) sjoaniquet@alaoeste.com
Se estima que el 50-70% de las personas con obesidad, padecerán hígado graso
4 de marzo, Día Mundial de la Obesidad Se estima que el 50-70% de las personas con obesidad, padecerán hígado graso La enfermedad de hígado graso está ligada a los principales factores de riesgo que se relacionan con alteraciones metabólicas, entre las que destacan la obesidad y diabetes La relación de causalidad entre obesidad e hígado graso es bidireccional y de retroalimentación, los pacientes que presentan hígado graso de inicio tienen mayor riesgo de desarrollar obesidad, hipertensión o diabetes El hígado graso afecta a 1 de cada 4 personas que cuentan con exceso de grasa en este órgano 29 de febrero de 2024. Con motivo del Día Mundial de la Obesidad, celebrado el 4 de marzo, la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) busca concienciar sobre esta enfermedad y, sobre todo, sobre su relación con el hígado graso que se estima afectará al 50-70% de personas con obesidad, como mínimo en un estadio inicial, y que ya afecta a 1 de cada 4 personas que cuentan con exceso de grasa en este órgano. En este sentido, el hígado graso viene definido por la presencia de más de un 5% de grasa en el hígado que empeora cuando se produce una inflamación o fibrosis (pequeñas cicatrices) en el mismo. Esto suele estar ligado a las principales alteraciones metabólicas entre las que destacan la obesidad y la diabetes, aunque, puede haber otras como el exceso de colesterol o la hipertensión arterial. “Es difícil separar obesidad e hígado graso” ya que, normalmente, “las personas con obesidad suelen desarrollar enfermedades hepáticas por otros motivos”, indica el Dr. Javier Ampuero, Médico Adjunto del Servicio de Aparato Digestivo del Hospital Universitario Virgen del Rocío (Sevilla), investigador del Instituto de Biomedicina de Sevilla (IBIS) y experto de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD). De hecho, “en consulta cada vez se ven más casos en los que el consumo de alcohol y la presencia de alteraciones metabólicas son las principales enfermedades que desencadenan cirrosis (estadio más avanzado del hígado graso), cáncer de hígado y trasplantes” afirma el Dr. Ampuero. En este sentido, la relación de causalidad entre obesidad e hígado graso es bidireccional y de retroalimentación, ya que, normalmente, “el hígado graso es más consecuencia de la obesidad que causa”, sin embargo, “los pacientes que presentan hígado graso de inicio tienen mayor riesgo de desarrollar obesidad, hipertensión o diabetes”, concluye el doctor. Respecto a la sintomatología, el hígado graso como enfermedad hepática no presenta unos síntomas definidos, a menos que esté muy avanzada, por lo que “es un aspecto a trabajar a la hora de generar concienciación en la población” señala el doctor, así como “sensibilizar sobre su posible relación con un trastorno metabólico como es la obesidad”. Tratamiento A día de hoy, el tratamiento fundamental para mejorar ambas patologías pasa por incidir en la importancia de mantener un estilo de vida saludable. A este respecto, el Dr. Ampuero indica que lo primero es “insistir en la actividad física”, por lo que, “recomendamos como mínimo 8.000 pasos al día, es más importante fijarse en los pasos que en la báscula”. Y, por otro lado, “llevar una dieta controlada en calorías”, es decir, “reducir la ingesta calórica e incrementar el consumo de fruta, verdura, pescado, etc.”. El principal problema es que “se come mal o se come en exceso”. Por tanto, “teniendo una intervención sobre el estilo de vida, la obesidad y el hígado graso deben mejorar”. Además, señala que, “hay que tener en cuenta que no existe un tratamiento específico actualmente”, sí es cierto que existen ensayos clínicos en desarrollo como algún medicamente antidiabético que, “consiguen una pérdida de peso de hasta el 20% y se ha observado que reducen la inflamación hepática”, no obstante, indica el Dr. Ampuero “que no se recetan a personas no diabéticas en la actualidad”. Otro caso sería si el paciente ya presentara hígado graso en su estadio más avanzado, “el tratamiento para la cirrosis se centra en que el paciente no desarrolle más complicaciones que puedan acabar en cáncer de hígado o trasplante”. En este sentido, España es uno de los países más afectados por la obesidad infantil y adolescente lo que implica que, “en el futuro esos niños puedan desarrollar una enfermedad hepática avanzada”. Por tanto, “tenemos que trabajar en la concienciación de la población en que la posibilidad de tener sobrepeso ahora y desarrollar una enfermedad hepática en el futuro existe y se puede prevenir”, concluye el Dr. Javier Ampuero. Campaña “Una vida saludable por un hígado sano” La Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD) lanzó el año pasado la campaña “Una vida saludable por un hígado sano” en la que, durante dos años, pretende concienciar sobre las dos enfermedades que más afectan al hígado y que pueden desencadenar cirrosis hepática: enfermedad hepática por alcohol e hígado graso. No obstante, se pueden prevenir mediante hábitos de vida saludable que incluyen limitar el consumo de alcohol y evitar la obesidad llevando una dieta equilibrada y practicando ejercicio físico. En este sentido, el primer año se centró en la enfermedad hepática por alcohol y en 2024 abordará el hígado graso con el objetivo es reducir la incidencia de ambas enfermedades a través de la difusión de información rigurosa elaborada por expertos especialistas y dirigida a toda la población. Toda la información y acceso a los materiales de la campaña: https://www.saludigestivo.es/campanas-de-concienciacion-y-sensibilizacion/campana-concienciacion-una-vida-saludable-higado-sano/ Más información www.saludigestivo.es PARA MÁS INFORMACIÓN Y GESTIÓN DE ENTREVISTAS: Montse Llamas (636 820 201) mllamas@alaoeste.com Sonia Joaniquet (663 848 916) sjoaniquet@alaoeste.com